Una tabla de quesos y embutidos no es solo una comida, es una experiencia sensorial. Al equilibrar sabores, texturas y colores, creas no solo una delicia culinaria sino también una obra de arte comestible que invita a tus invitados a disfrutar con todos los sentidos.
Equipment
- 1 tabla de madera
Ingredientes
- Quesos variados (suave, semicurado, curado, azul)
- Embutidos variados (lomo, jamón ibérico)
- Frutas frescas (frambuesas, moras, arándanos, uvas)
- Frutos secos (almendras, nueces, anacardos, pistachos...)
- Mermeladas o miel (al gusto)
- Panes tostados o crackers
Elaboración paso a paso
Quesos:
- Elige una variedad de quesos que incluyan al menos un queso suave (como Brie o Camembert), un queso semiduro (como Cheddar o Gouda), un queso curado y un queso azul o con sabor fuerte (como Roquefort o Gorgonzola)
- Esto proporciona una buena gama de sabores y texturas.
- Los quesos deben servirse a temperatura ambiente para maximizar su sabor y textura. Sácalos del refrigerador unos 30 minutos antes de servir.
Embutidos:
- Selecciona diferentes tipos de embutidos de alta calidad, como preferencia personal recomendaría jamón ibérico y lomo.
- Pártelos en lonchas finas.
Acompañamientos, incorpora elementos como:
- Frutas frescas: uvas, higos, frambuesas, moras
- Lava las frutas y sécalas bien.
- Frutos secos: almendras, nueces, anacardos, pistachos...
- Panes variados: baguette, panes tostados o crackers
- Algo dulce como mermeladas o miel
Distribución
- Selecciona una tabla o bandeja grande suficiente para colocar todos los ingredientes.
- Dispón los quesos en diferentes puntos de la tabla. Por ejemplo, coloca un queso en cada esquina y uno en el centro. Asegúrate de separar los sabores fuertes de los suaves.
- Coloca los embutidos alrededor de los quesos. Puedes hacer pequeños montones o enrollarlos para dar un aspecto más elegante.
- Rellena los espacios entre quesos y embutidos con las frutas. La idea es añadir color y frescura entre los sabores más intensos de los quesos y embutidos.
- Esparce frutos secos en los pequeños espacios que queden. Esto añade textura y un contraste de sabor.
- Utiliza hojas de perejil o romero para dar un toque decorativo y fresco a la tabla.
- Coloca panes o crackers alrededor de la tabla o en un plato aparte. Puedes también incluir un pequeño bol con miel o mermelada para complementar.
Notas
Una tabla de quesos y embutidos no es solo una comida, es una experiencia sensorial. Al equilibrar sabores, texturas y colores, creas no solo una delicia culinaria sino también una obra de arte comestible que invita a tus invitados a disfrutar con todos los sentidos.