Cómo hacer risotto casero de jamón ibérico y champiñones:
El risotto es un plato tradicional italiano que se caracteriza por su cremosidad y textura única, lograda mediante la cocción lenta del arroz en caldo. Este plato ha sido adaptado en numerosas cocinas alrededor del mundo, integrando ingredientes locales y métodos de preparación distintivos. En este caso, la inspiración española se manifiesta principalmente a través del uso del jamón ibérico, un producto icónico de la gastronomía española, conocido por su sabor profundo y textura delicada.
El jamón ibérico proviene de cerdos de raza ibérica, criados en libertad y alimentados principalmente con bellotas, los que le confiere su sabor y aroma característicos. Este ingrediente, apreciado y valorado en todo el mundo, aporta al risotto un toque de sofisticación y una profundidad de sabor que lo distingue de otras versiones del plato.
Las variedades del arroz ideales para risotto, debido a su alta concentración de almidón, que contribuye a la cremosidad del plato son Arborio y Carnaroli.
Este plato representa una hermosa fusión entre la cocina italiana y española, tomando lo mejor de ambas tradiciones culinarias.
El uso de ingredientes de alta calidad, como el jamón ibérico y los champiñones frescos, es crucial para el éxito del plato. La autenticidad y la calidad del jamón, en particular, elevan el risotto a un nivel gourmet.
La preparación del risotto requiere paciencia y técnica, ya que el arroz debe ser cocinado lentamente, añadiendo el caldo poco a poco y removiendo constantemente para liberar el almidón.
El plato destaca por su equilibrio perfecto entre la cremosidad del arroz, la intensidad del jamón y la suavidad de los champiñones.
Ingredientes
- 350 g arroz Arborio
- 150 g jamón ibérico en lonchas finas
- 1 cebolla
- 2 diente de ajo
- 1 l caldo de carne
- 125 ml vino blanco
- 75 g queso parmesano
- 50 g mantequilla
- 1 cebollino fresco
- 1 aceite de oliva virgen extra
- 1 sal
Elaboración paso a paso
Elaboración:
- Pela y pica finamente los dientes de ajo y la cebolla
- Limpia los champiñones con un paño húmedo y córtalos en cuadraditos.
- En una cazuela con un poco de aceite de oliva, sofríe los ajos y la cebolla a fuego medio hasta que estén tiernos.
- Añade los champiñones y cocínalos hasta que comiencen a dorarse.
- Añade arroz a la cazuela y cocínalo con el sofrito durante dos minutos, removiendo constantemente para que se impregne bien del sabor y se vuelva un poco traslúcido.
- Vierte el vino blanco y deja que se evapore el alcohol, removiendo constantemente.
Cocinar el arroz:
- Añade el caldo de carne caliente poco a poco, removiendo frecuentemente y esperando a que el líquido se haya absorbido antes de añadir más. Ajusta la sal con precaución, teniendo en cuenta que el caldo y el queso parmesano aportan salinidad.
- Repite este proceso durante unos 16 minutos o hasta que el arroz esté al dente y tenga una consistencia cremosa.
- Cuando el arroz esté en su punto, retira la cazuela del fuego.
- Añade la mantequilla y el queso parmesano rallado. Remueve bien hasta que se integren todos los ingredientes y el risotto adquiera una textura cremosa.
- Justo antes de servir, incorpora el jamón ibérico partido en lonchas finas.