Empanadillas caseras de atún. El sabor de la cocina tradicional española.
Las empanadillas de atún caseras son de esas recetas que nos devuelven directamente a la cocina de casa, a las manos de nuestras madres o abuelas cerrándolas con un tenedor y al olor que salía del horno o de la sartén. Sencillas, humildes y llenas de sabor, forman parte de nuestra memoria gastronómica y siguen funcionando igual de bien hoy que entonces.
El relleno es el clásico: atún, huevo cocido, cebolla y pimiento, todo bien pochado y ligado con tomate, sin prisas, dejando que cada ingrediente aporte lo suyo. No necesitan más para conquistar. Son jugosas por dentro, doradas por fuera y perfectas tanto recién hechas como al día siguiente, cuando incluso están más ricas.
Estas empanadillas son ideales para una comida en familia, para llevar en un táper, para una cena informal o para poner en el centro de la mesa y que vuelen. Una receta de las que no fallan, cocina casera en estado puro, de esas que se preparan una y otra vez porque siempre apetecen.
Ingredientes
- 12 oblea (1 paquete de obleas)
- 3 lata de atún en aceite o al natural (bien escurridas)
- 2 huevo
- 1 cebolla
- 1 pimiento verde
- 4-5 cda tomate frito
- Aceite de oliva (para el sofrito y para freír)
Instrucciones
- Cuece los huevos durante 12 minutos. Después enfríalos con agua fría, pélalos y resérvalos.
Prepara el relleno:
- En una sartén con un poquito de aceite de oliva, sofríe la cebolla y el pimiento verde picados finos. Cocina a fuego suave hasta que estén bien tiernos y ligeramente dorados.
- Agrega el atún desmenuzado y el tomate frito. Remueve bien para integrar todos los sabores.
- Con la sartén fuera del fuego, pica los huevos cocidos directamente sobre el relleno, ayudándote con un tenedor. Mezcla todo hasta conseguir un relleno uniforme. Reserva y deja enfriar un poco.
Rellena las empanadillas:
- Extiende las obleas de empanadillas sobre la encimera. Coloca una cucharada del relleno en el centro de cada una.
- Cierra doblándolas por la mitad y presiona los bordes con un tenedor para sellarlas bien.
Fríe las empanadillas:
- Calienta abundante aceite en una sartén. Cuando esté bien caliente, fríe las empanadillas por ambos lados hasta que estén doradas y crujientes.
- Retira las empanadillas y colócalas sobre papel absorbente para eliminar el exceso de aceite.
