Crema de calabaza y boniato: saludable, casera y deliciosa.
La cocina tradicional siempre ha sabido sacar el máximo partido de los ingredientes de temporada, y esta crema es claro ejemplo de ello. En muchas regiones de España, la calabaza y el boniato se han cultivado durante siglos y han formado parte de la alimentación cotidiana, especialmente en los meses más fríos. Además, eran ingredientes básicos en las despensas por su larga conservación y su valor energético.
Muy fácil de preparar y perfecta tanto como primer plato o como cena ligera. Aunque lo que hace especial a esta crema es la combinación de la calabaza, con su textura sedosa y sabor suave, y el boniato, que aporta un dulzor natural y una cremosidad extra. Además de su sabor, esta crema es una opción muy saludable. La calabaza es rica en antioxidantes y fibra, mientras que el boniato aporta energía de liberación lenta, ideal para mantenernos saciados durante más tiempo.
Ingredientes
- 1 puerro
- 400 g boniato
- 600 g calabaza
- Sal (un pellizco)
- Agua (la necesaria para cubrir las verduras)
- Aceite de oliva
Elaboración paso a paso
- Limpia el puerro y córtalo en rodajas finas.
- Parte la calabaza en rodajas para pelarla más fácilmente, retira las semillas y trocéala.
- Pela los boniatos y trocéalos también.
- En la olla rápida añade un chorrito de aceite de oliva y sofríe el puerro hasta que esté tierno. Incorpora la calabaza y los boniatos, mezcla y cocina todo junto durante 2 minutos.
- Cubre con agua, añade un pellizco de sal, tapa la olla y deja hervir 10 minutos desde que sube la válvula.
- Una vez cocido, tritura hasta conseguir una crema suave y sin grumos.
