Cómo hacer encebollado:
El encebollado es un guiso tradicional que, como podemos adivinar, tiene a la cebolla como protagonista. Además de ajos, bacalao, huevos, pimentón y el toque inconfundible del laurel.
En casa lo llamamos «encebollao», y aunque la RAE no contempla este término yo le tengo especial cariño porque me lo enseñó mi madre y ella lo aprendió de mi abuela. En nuestra familia ha sido siempre un clásico en temporada de frío, y es que es un plato reconfortante, con pocas calorías y lleno de sabor.
Es un plato procedente de Ecuador, y allí lo hacen con cualquier pescado. Nosotros, al adoptarlo en la Península, le hemos puesto el pescado que más utilizamos en nuestros guisos, el bacalao desalado. Pero en Ecuador, además de con diferentes tipos de pescado, se prepara con pulpo, calamar o incluso marisco. Y, además de la enorme cantidad de cebolla, se suele acompañar con otras verduras como yuca o tomate. Las especias empleadas también tienen su toque propio: ají en polvo, cilantro o lima suelen ser las más empleadas. Y sería después de la Conquista que este plato llegara a nuestro país para adaptarlo a nuestros ingredientes y nuestros gustos.
Sea como fuere, hoy en día es un clásico en muchas familias, sobre todo en los días de más frío. Para muchos de nosotros es un guiso que sabe a hogar.
Ingredients
- 1,5 Kg de cebolla
- 3 dientes de ajo
- 1 hoja de laurel
- 500 g bacalao desalado
- 5 huevos
- Sal
- Pimienta
- ½ cda pimentón
- Aceite de oliva virgen extra
Instructions
- Pela lo ajos y las cebollas y pártelos en láminas finas. Ponlos en una cazuela, cubre con agua y lleva al fuego.
- Cuando comience a hervir, desecha este primer agua de cocción y cubre de nuevo con agua.
- Añade a la cazuela la hoja de laurel, el pimentón, sal y pimienta. Deja hervir con fuego suave 1,5 horas.
- Echa el bacalao desalado troceado y continúa la cocción 15 minutos.
- Bate ligeramente los huevos. Simplemente romper un poco las yemas.
- Echa los huevos a la cazuela y continúa cocinando 2 minutos.
- Apaga el fuego y deja reposar un poquito.