Pre calienta el horno a 180° calor arriba y abajo.
Pon los pimientos en una fuente para asar. Riega con un poco de aceite de oliva, masajeándolos con las manos para distribuir por toda la superficie de los pimientos y hornéalos durante una hora.
Pasado este tiempo, tapa los pimientos con un papel vegetal y un paño para que suden y se pelen más fácilmente.
Escalda los tomates sumergiéndolos unos segundos en agua hirviendo y pasándolos inmediatamente a agua muy fría. Pélalos, retira el pedúnculo, pártelos en cuartos y quita la semillas. Pícalos muy finos y llévalos a una sartén con un poco de aceite de oliva, para cocinarlos a fuego medio bajo durante 12 minutos.
Pela los pimientos, límpialos de semillas y pártelos en tiras muy finas.
Machaca en el mortero los ajos con la sal.
Apaga el fuego y mezcla los tomates cocinados con los pimientos, el majado de ajos y los cominos.
Sirve el asadillo con huevo cocido y ventresca o bonito en aceite.
Riega con un poco de aceite de oliva virgen extra.